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¿Tratar la distensión en la pantorrilla con hielo ayuda?

Hielo para la distensión en la pantorrilla
Kim Van Deventer
Feb 6, 2024
Editado médicamente por
Maryke Louw
Mucha gente opta por tratar una distensión muscular en la pantorrilla con hielo, ya que, afirman, disminuye el dolor, la hinchazón y la inflamación. Veamos cómo funciona el hielo y si vale la pena utilizarlo como parte de tu programa de recuperación.

Te has sobreexigido al correr y has escuchado el tan temido crujido en el músculo de la pantorrilla. Tras un par de horas, el dolor va aumentando y hacer estiramientos no es suficiente, así que te preguntas si el hielo puede ayudar. Antes de tomar esa bolsa de guisantes congelados, existen ciertos aspectos que deberías evaluar con cuidado. A la hora de tratar un tirón en el gemelo, generalmente se intenta minimizar los daños, fomentar la recuperación muscular y, luego, recuperar la funcionalidad. ¿Pero es el hielo la mejor forma de lograrlo? Veámoslo a continuación.

Minimizar los daños

Minimizar los daños implica estar cómodo/a y asegurarte de que la lesión no empeore. ¿Cómo ayuda el hielo en este sentido? Primero, echemos un vistazo a los efectos que tiene en el tejido muscular para determinar si podría ayudarte.

¿Qué hace el hielo en los tejidos musculares?

Los estudios científicos muestran que aplicar hielo en alguna zona del cuerpo puede:

Aplicar hielo en la pantorrilla

Cómo reaccionará su tejido muscular
1
Disminuir el flujo sanguíneo y el sangrado.
2
Adormecer los nervios y ralentizar sus señales.
3
Disminuir los síntomas de inflamación aguda como el dolor y la hinchazón.
4
Disminuir la demanda de energía local (cuánta energía necesitan) del tejido superviviente.

¿El hielo ayuda a disminuir el dolor?

Probablemente. Aunque los protocolos sobre el alivio del dolor no son claros, los estudios sugieren que el hielo puede ayudar a disminuir el dolor asociado a las lesiones en los tejidos blandos. Además, hay otros estudios que sostienen esta idea de que no merece la pena utilizar hielo en lesiones agudas, salvo para conseguir un alivio temporal del dolor y un efecto adormecedor. El hielo puede disminuir el dolor de dos maneras principales:

  • Reducir la inflamación y quitar la presión de los nervios disminuye el dolor.
  • Adormecer los nervios y provocar que menos señales de dolor lleguen al cerebro disminuye la percepción del dolor.

¿Cuál es la conclusión?

El uso de hielo es una forma segura y efectiva de disminuir el dolor que podemos conseguir y aplicar fácilmente. Sin embargo, hay ciertas precauciones y cuestiones de seguridad que destacamos en las siguientes secciones.

¿El hielo ayuda a aliviar la inflamación?

Aunque el hielo parezca una solución rápida y sencilla de reducir la inflamación, los estudios que sostienen esta idea son escasos y contradictorios. Por ejemplo, uno de los estudios afirma que la aplicación de hielo retrasó la inflamación en lesiones graves, lo cual es positivo porque la inflamación severa puede dificultar la recuperación. Sin embargo, otro estudio sostiene que el hielo aumentó la inflamación. Esto puede deberse a que, cuando se enfrían, los vasos linfáticos (el sistema de drenaje de desechos del cuerpo) pueden volverse más porosos y provocar que el flujo de fluido linfático regrese al lugar de la lesión. Como el drenaje linfático y la circulación de la sangre no eran buenos, la inflamación en estos casos fue mayor. Es por ello que resulta importante no sobreenfriar ninguna zona del cuerpo.

¿Cuál es la conclusión?

Probablemente, el hielo no es la mejor opción para reducir la inflamación si la lesión en tu pantorrilla es leve o si, en realidad, no tienes demasiada inflamación. En caso de que sí sea más grave, el hielo podría ayudarte a controlar la inflamación. Consulta siempre con tu profesional de salud antes de aplicar hielo en una lesión grave, ya que sobreenfriar la zona puede aumentar la inflamación. Echa un vistazo a la sección sobre cómo aplicar hielo de manera segura que verás más adelante.

¿El hielo ayuda a prevenir otras lesiones?

El hielo puede ayudar a prevenir lesiones secundarias al reducir la inflamación y quitar la presión de los tejidos adyacentes, lo cual hace que la lesión del tejido se limite a una zona más pequeña. También puede disminuir la demanda energética de los tejidos, lo cual significa que las células del músculo lesionado necesitarán menos energía y oxígeno para sobrevivir y recuperarse. De esta manera, se ayuda a que las células dañadas se recuperen con mayor rapidez.

¿Cuál es la conclusión?

En el caso de lesiones graves, la aplicación de hielo puede reducir el riesgo de sufrir lesiones secundarias y también facilitar la recuperación de las células musculares. Sin embargo, necesitamos más estudios para saberlo de manera fehaciente.

Recuperación del músculo

El hielo puede fomentar o retrasar la recuperación

Las pruebas de que se pueda utilizar hielo para promover la recuperación muscular son escasas y contradictorias. Algunos estudios sugieren que el hielo podría ayudar a que te recuperes de tu lesión. Sin embargo, otros estudios concluyen que el uso de hielo cumple un papel limitado en la recuperación de una lesión grave, y muchos informan que el hielo puede, incluso, retrasar la recuperación más que fomentarla. El problema con los estudios disponibles tiene cuatro aspectos principales:

  1. Muchos estudios solo utilizan personas sanas.
  2. Generalmente, las «lesiones» fueron causadas por el ejercicio y no por un traumatismo.
  3. La mayoría de los estudios utilizan animales y no seres humanos.
  4. Ningún estudio examina específicamente el efecto del hielo en lesiones musculares por traumatismos en seres humanos.

Por lo tanto, resulta difícil aplicar las conclusiones de los estudios en la práctica. A pesar de que claramente falta mucha información, si observamos con más detalle, es posible que el hielo ayude a la recuperación muscular más de lo que pensamos, y lo hace de la siguiente manera:

El hielo puede ayudarte a mantenerte en movimiento

Si sientes mucho dolor, puede que tu movilidad se vea limitada. En este caso, el hielo puede reducir el dolor y hacer que seas capaz de moverte de manera cómoda otra vez. Así, podrás empezar, o continuar, con un programa de rehabilitación para distensiones musculares en la pantorrilla.

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El movimiento hace que la circulación aumente

Al moverte de manera activa y sin dolor tras sufrir la lesión, tus músculos se ponen a trabajar. El movimiento actúa como una bomba para los vasos linfáticos y estimula la circulación de la sangre. Tener un buen flujo sanguíneo y linfático hace que salga lo «malo» y que entre lo «bueno». Los desechos, las toxinas y las células muertas del músculo se eliminan, mientras que se incorporan el oxígeno, los nutrientes y las células que reconstruyen los tejidos.

Una vez que se alcanza el equilibrio, la recuperación puede avanzar

Cuando se recupera el equilibrio saludable en los tejidos, la lesión en los músculos de la pantorrilla puede pasar, poco a poco, de la fase inflamatoria a la fase de recuperación.

¿Cuál es la conclusión?

Si sientes dolor intenso y, por lo tanto, tu movimiento se ve limitado, puedes utilizar hielo durante las primeras etapas de la lesión para empezar a hacer ejercicios de rehabilitación suaves. La actividad estimula la circulación y ayuda en tu proceso de recuperación

¿Cómo tratar distensión en la pantorrilla con hielo de forma segura?

¿En qué momento deberías tratar la lesión en la pantorrilla con hielo?

Aplica hielo lo antes posible tras la lesión, pues tendrás un mejor resultado a la hora de reducir la inflamación y disminuir el dolor a corto plazo si lo aplicas hasta 1 semana después de la lesión. No se conocen los efectos a largo plazo que produce la aplicación de hielo respecto de la reparación de los tejidos y la vuelta al entrenamiento.

¿Con qué frecuencia y durante cuánto tiempo deberías tratar una distensión en la pantorrilla con hielo?

Hay pruebas que reflejan que la aplicación de hielo varias veces por día durante periodos cortos (de 10 a 15 minutos y no más de 20) es más efectiva que su aplicación prolongada. El uso intermitente también disminuye el riesgo de sufrir una lesión por congelación (cuando el tejido se enfría demasiado). Al aplicar hielo, tanto la duración como la intensidad son factores cruciales porque el efecto vasoconstrictor (estrechamiento de los vasos sanguíneos) que produce el hielo continúa aunque ya no se esté aplicando. Por esta razón, la aplicación de hielo por periodos prolongados puede detener el proceso de recuperación.

Precauciones y contraindicaciones

  • Nunca apliques el hielo directamente en la piel ni tampoco sobre una herida abierta, ya que puede dañar la piel y los tejidos.
  • Tampoco optes por tratar distensión en la pantorrilla con hielo si tienes problemas de sensibilidad en la piel, un resfriado o una mala circulación.

Formas de tratar una distensión en la pantorrilla con hielo

Los guisantes congelados funcionan muy bien, ya que se amoldan a la forma de la pantorrilla.

Existen diferentes maneras de tratar una distensión en la pantorrilla con hielo. Las opciones más comunes son las siguientes:

  • Paquetes de hielo hechos en casa (hielo y agua en una bolsa plástica resellable o un paquete de guisantes congelados).
  • Paquetes de gel congelado (aunque hay pruebas que sugieren que los guisantes congelados funcionan mejor que los paquetes de gel).
  • Hacerse masajes con el hielo que saques tras poner agua en un vaso de papel y colocarlo en el congelador, lo cual funciona casi un 40 % mejor que si se usan paquetes de hielo.

Aplicación de hielo en los músculos después de la fase aguda de la lesión

Hay pocas pruebas científicas que afirmen que la aplicación de hielo ayude a controlar el dolor y a reducir las molestias en los músculos durante y después del ejercicio. Sin embargo, algunos estudios demuestran que el hielo directamente podría tener efectos negativos para la fuerza y la resistencia muscular si se aplica después de las sesiones de ejercicio.

¿Quiere decir esto que nunca deberías usarlo?

No, ya que depende de tu situación particular. Recomendamos no utilizar hielo al practicar deporte porque generalmente no es necesario y puede no resultar útil, pero hay situaciones en las que aplicar hielo puede ser beneficioso. Hablaremos de este tema con mayor detalle en otro artículo. Se necesitan más estudios que respalden el uso de hielo luego de la fase aguda de la lesión. Por ahora, deja el hielo para la etapa más temprana de rehabilitación (es decir, las primeras 72 horas).

Conclusión

En ocasiones, la aplicación de hielo en una distensión muscular en la pantorrilla ayuda, pero normalmente no es necesaria. El cuerpo tiene un sistema propio altamente inteligente que se encarga de curarte. El dolor y la inflamación tras lesionarte indican que este proceso de recuperación ha comenzado, y, por lo general, es mejor no interferir.

En lugar de eso, permite que tu cuerpo haga su trabajo y que los síntomas sigan su curso. Una de las mejores formas de permitir este proceso es seguir un programa progresivo para fortalecer la pantorrilla que se ajuste a las fases de recuperación. De esta forma, podrás conseguir músculos fuertes y resistentes al mismo tiempo que te recuperas.

Si necesitas ayuda para transitar tu distensión en la pantorrilla, ¡estamos aquí para ti! La app de Exakt Health está diseñada para ayudarte en la recuperación de una distensión muscular en la pantorrilla mediante un programa de tratamiento personalizado que es fácil de seguir y sencillo de usar. Descárgala en la app store.

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Kim Van Deventer
Kim Van Deventer es una escritora independiente de temas sanitarios y estratega de contenidos digitales para empresas sanitarias y agencias de contenidos médicos. Ha trabajado como fisioterapeuta durante más de 14 años, especializándose en la rehabilitación de lesiones deportivas, el tratamiento del dolor crónico y la salud de la mujer. Kim combina su experiencia clínica y sus conocimientos de marketing digital para crear contenidos relevantes y útiles que mejoren la vida de los pacientes.
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